Nuestro diccionario define a lo PÚBLICO como: “Común del pueblo o ciudad.”
A lo PRIVADO como: “Particular y personal de cada uno.” Recordemos, además que PRIVADO viene del latín PRIVATUS, que significa PRIVAR, y que a su vez significa: “despojar a uno de una cosa que poseía. Prohibir o vedar.”
Y al SOCIALISMO como: “Sistema de organización social y económico basado en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medios de producción y en la regulación por el Estado de las actividades económicas y sociales, y la distribución de los bienes. 2. Movimiento político que intenta establecer, con diversos matices, este sistema.”
Pues bien, yo pregunto ¿a qué viene que lo privado haya superado las barreras de lo personal y particular para haberse hecho con lo común del pueblo?
Hemos perdido la riqueza que durante generaciones se fue depositando en nuestro Estado y en todos los demás. En las últimas décadas, la consigna de los amantes de lo ajeno (siempre de guante blanco) ha sido la privatización de esa riqueza. Además conseguían adelgazar las posibilidades de defensa. Hoy los Estados van por el camino de desaparecer o como mucho convertirse en meros recaudadores, en legisladores a favor de lo privado.
Nos han vendido que lo privado es un ejemplo de eficiencia y productividad. Un ejemplo y modelo a instaurar. ¡Qué equivocados estamos!
Se da la sensación de que tras lo privado hay un ente bondadoso, hasta generoso. No es verdad. Tras lo privado hay élites que juegan con nuestro mundo y nos hacen cada vez más pobres mientras ellos se hacen cada vez más ricos. Son malvados, codiciosos y avaros.
Desde hace unas décadas, la consigna ha sido privatizar todo lo posible. Despojarnos de lo que teníamos como Nación. Así que éstas tienen muy poco margen de actuación y por eso los nuevos poderes (que no Naciones, sino corporaciones, multinacionales, etc.) deciden el qué, dónde y cuándo obtendrán mayores beneficios. A ellos no les importa las Naciones ni los Estados, sólo el beneficio, sólo el Mercado. A ellos no les importa las consecuencias de sus políticas y decisiones, están siempre a salvo. A ellos no les importa la gente, no les importa las personas sólo aquellas de las que puedan servirse para sus intereses, los compran, los chantajean, los envilecen. Así tenemos a nuestras gentes, confundidas en un sálvese quién pueda y no mires para atrás. Nuevas sociedades producto de sus intereses, donde nunca como antes vales lo que tienes.
En esta vieja Europa lo estamos viendo. Restándonos derechos adquiridos a través de la sangre derramada por nuestros antecesores. Una Europa bajo la dominación de la derecha, son éstos los brazos armados de los liberales antiguos y modernos. Los que siempre han defendido lo privado, a los que se les llena la boca cuando dicen que el individuo es lo importante y lo que tiene valor. Se olvidan de que el individuo no sería nada sin los demás. Los demás si son importantes, somos la sociedad. Y dentro de esa necesidad de los demás, es de donde podremos encontrar al individuo, al ser diferente que somos cada uno de nosotros. Los demás somos todos.
En nuestra Comunidad Autónoma de Murcia tenemos un caso como el del servicio de hemodiálisis en Cartagena. La Consejería de Sanidad, esa que tiene una deuda de más de 900 millones de euros, decide, con su consejera a la cabeza, privatizar ese servicio; aunque prefieren llamarlo (para disimular) externalización. Hacen el pliego de condiciones (digo que hacen por que no se sabe bien quién lo ha hecho, si los técnicos de la consejería o…) El caso es que aprovechando el nuevo hospital de Sta. Lucía, pues les dejan las instalaciones a la ganadora provisional (no hay otra) del concurso. No pagarán agua, ni luz, ni alquiler (no viene en el pliego) Como no me quiero ir muy lejos simplemente le diré, amable lector, que esto es privatizar. Dar pelotazos por todas las bandas. Además ponemos el parking del hospital a otra empresa privada que lo gestione. ¡Que se joda el personal! Y que pague.
Nuestro Presidente se empeña en hacer un aeropuerto internacional, ese de Corvera, y las obras se las adjudican a amigos suyos. La gestión será privada pero hemos ayudado con un aval de 200 millones y con las infraestructuras de accesos que también serán un pico largo. Y no contento se le ocurre a este nuestro presidente decirle al ministro Blanco que quiere que el AVE pase por debajo de las pistas del aeropuerto. No veo cuál es la necesidad de que el AVE pase por debajo de las pistas. ¿Es que van a ir los murcianos en AVE al aeropuerto? Pero si no habrá mas de 20 km., hasta Murcia capital. O quizás sea que los señores pasajeros que se apeen de los aviones se vayan a Cartagena o a Murcia en AVE o quizás a Alicante. Esto es de puro cachondeo. Creo responderá, más bien, a retrasar la llegada del AVE a Cartagena. De este modo ni el gobierno autonómico ni el municipal de Cartagena que no tienen, ambos, ni un duro, tendrán que poner ni hacer nada para que el AVE llegue a Cartagena hasta del 2020. Si no es así que lo expliquen, que digan cuáles son las razones para que el AVE haga parada en el Aeropuerto Internacional de Corvera. Y ya puestos, Presi, por qué no conectamos Alhama con el AVE hasta el aeropuerto, con los millones de visitantes que van a venir, estaría bien, dele una pensadita que aún está a tiempo, hombre. Tomarle el pelo a los cartageneros, como siempre.
Aprovecho y le pediría a la Alcaldesa de Cartagena que mejore la entrada a la ciudad por la autovía que viene de Alicante y de Murcia, vamos la única que hay. Es deplorable la situación que, desde el puente que conduce al puerto y la entrada a la plaza de Alicante, tenemos en la principal entrada a la ciudad (de competencia municipal). El asfalto está necesitado de su reposición. El alumbrado lleva años apagado. Las vallas verdes, que instalaron para que no se viera el dantesco espectáculo de Potasas, ya las podían quitar, 9 años llevan puestas. Aproveche y también le echa una capita de asfalto a todo el paseo de Alfonso XIII que, con los baches que hay, se puede bailar la macarena. La bienvenida que se ofrece a los foráneos es deprimente. No se escude más tiempo, Alcaldesa, en el desarrollo urbanístico de la antigua potasas que al paso que vamos se van a caer los puentes ellos solos. Dígale a Cabezos que pida otro préstamo y sino dígaselo a Aquagest que ya se encargará usted de subirnos un poco más el agua a los cartageneros. Otro caso de privatización cojonudo… No se olvide hacerlo, que las elecciones están muy cerca, y de paso, que le den una manecica de pintura al cerro de Los Mateos que también está muy falto.
Es mi deseo que todos los ciudadanos sepan diferenciar lo privado de lo público, no es necesario hacer grandes ensayos, sólo acudir al diccionario, sencillo. Que no se dejen engañar, ni tomar el pelo aunque demonicen a lo público como el mal que impide el progreso, es falso. La derecha siempre velará por lo privado. El socialismo lo ha de hacer por lo público. Lo han de defender siempre y por encima de argumentos que tergiversan la realidad.
La suma del esfuerzo de todos, no tiene por que ir a manos enguantadas de blanco.
Exijamos y defendamos lo público y dejemos lo privado para quien se lo pueda pagar. Sin más.
A lo PRIVADO como: “Particular y personal de cada uno.” Recordemos, además que PRIVADO viene del latín PRIVATUS, que significa PRIVAR, y que a su vez significa: “despojar a uno de una cosa que poseía. Prohibir o vedar.”
Y al SOCIALISMO como: “Sistema de organización social y económico basado en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medios de producción y en la regulación por el Estado de las actividades económicas y sociales, y la distribución de los bienes. 2. Movimiento político que intenta establecer, con diversos matices, este sistema.”
Pues bien, yo pregunto ¿a qué viene que lo privado haya superado las barreras de lo personal y particular para haberse hecho con lo común del pueblo?
Hemos perdido la riqueza que durante generaciones se fue depositando en nuestro Estado y en todos los demás. En las últimas décadas, la consigna de los amantes de lo ajeno (siempre de guante blanco) ha sido la privatización de esa riqueza. Además conseguían adelgazar las posibilidades de defensa. Hoy los Estados van por el camino de desaparecer o como mucho convertirse en meros recaudadores, en legisladores a favor de lo privado.
Nos han vendido que lo privado es un ejemplo de eficiencia y productividad. Un ejemplo y modelo a instaurar. ¡Qué equivocados estamos!
Se da la sensación de que tras lo privado hay un ente bondadoso, hasta generoso. No es verdad. Tras lo privado hay élites que juegan con nuestro mundo y nos hacen cada vez más pobres mientras ellos se hacen cada vez más ricos. Son malvados, codiciosos y avaros.
Desde hace unas décadas, la consigna ha sido privatizar todo lo posible. Despojarnos de lo que teníamos como Nación. Así que éstas tienen muy poco margen de actuación y por eso los nuevos poderes (que no Naciones, sino corporaciones, multinacionales, etc.) deciden el qué, dónde y cuándo obtendrán mayores beneficios. A ellos no les importa las Naciones ni los Estados, sólo el beneficio, sólo el Mercado. A ellos no les importa las consecuencias de sus políticas y decisiones, están siempre a salvo. A ellos no les importa la gente, no les importa las personas sólo aquellas de las que puedan servirse para sus intereses, los compran, los chantajean, los envilecen. Así tenemos a nuestras gentes, confundidas en un sálvese quién pueda y no mires para atrás. Nuevas sociedades producto de sus intereses, donde nunca como antes vales lo que tienes.
En esta vieja Europa lo estamos viendo. Restándonos derechos adquiridos a través de la sangre derramada por nuestros antecesores. Una Europa bajo la dominación de la derecha, son éstos los brazos armados de los liberales antiguos y modernos. Los que siempre han defendido lo privado, a los que se les llena la boca cuando dicen que el individuo es lo importante y lo que tiene valor. Se olvidan de que el individuo no sería nada sin los demás. Los demás si son importantes, somos la sociedad. Y dentro de esa necesidad de los demás, es de donde podremos encontrar al individuo, al ser diferente que somos cada uno de nosotros. Los demás somos todos.
En nuestra Comunidad Autónoma de Murcia tenemos un caso como el del servicio de hemodiálisis en Cartagena. La Consejería de Sanidad, esa que tiene una deuda de más de 900 millones de euros, decide, con su consejera a la cabeza, privatizar ese servicio; aunque prefieren llamarlo (para disimular) externalización. Hacen el pliego de condiciones (digo que hacen por que no se sabe bien quién lo ha hecho, si los técnicos de la consejería o…) El caso es que aprovechando el nuevo hospital de Sta. Lucía, pues les dejan las instalaciones a la ganadora provisional (no hay otra) del concurso. No pagarán agua, ni luz, ni alquiler (no viene en el pliego) Como no me quiero ir muy lejos simplemente le diré, amable lector, que esto es privatizar. Dar pelotazos por todas las bandas. Además ponemos el parking del hospital a otra empresa privada que lo gestione. ¡Que se joda el personal! Y que pague.
Nuestro Presidente se empeña en hacer un aeropuerto internacional, ese de Corvera, y las obras se las adjudican a amigos suyos. La gestión será privada pero hemos ayudado con un aval de 200 millones y con las infraestructuras de accesos que también serán un pico largo. Y no contento se le ocurre a este nuestro presidente decirle al ministro Blanco que quiere que el AVE pase por debajo de las pistas del aeropuerto. No veo cuál es la necesidad de que el AVE pase por debajo de las pistas. ¿Es que van a ir los murcianos en AVE al aeropuerto? Pero si no habrá mas de 20 km., hasta Murcia capital. O quizás sea que los señores pasajeros que se apeen de los aviones se vayan a Cartagena o a Murcia en AVE o quizás a Alicante. Esto es de puro cachondeo. Creo responderá, más bien, a retrasar la llegada del AVE a Cartagena. De este modo ni el gobierno autonómico ni el municipal de Cartagena que no tienen, ambos, ni un duro, tendrán que poner ni hacer nada para que el AVE llegue a Cartagena hasta del 2020. Si no es así que lo expliquen, que digan cuáles son las razones para que el AVE haga parada en el Aeropuerto Internacional de Corvera. Y ya puestos, Presi, por qué no conectamos Alhama con el AVE hasta el aeropuerto, con los millones de visitantes que van a venir, estaría bien, dele una pensadita que aún está a tiempo, hombre. Tomarle el pelo a los cartageneros, como siempre.
Aprovecho y le pediría a la Alcaldesa de Cartagena que mejore la entrada a la ciudad por la autovía que viene de Alicante y de Murcia, vamos la única que hay. Es deplorable la situación que, desde el puente que conduce al puerto y la entrada a la plaza de Alicante, tenemos en la principal entrada a la ciudad (de competencia municipal). El asfalto está necesitado de su reposición. El alumbrado lleva años apagado. Las vallas verdes, que instalaron para que no se viera el dantesco espectáculo de Potasas, ya las podían quitar, 9 años llevan puestas. Aproveche y también le echa una capita de asfalto a todo el paseo de Alfonso XIII que, con los baches que hay, se puede bailar la macarena. La bienvenida que se ofrece a los foráneos es deprimente. No se escude más tiempo, Alcaldesa, en el desarrollo urbanístico de la antigua potasas que al paso que vamos se van a caer los puentes ellos solos. Dígale a Cabezos que pida otro préstamo y sino dígaselo a Aquagest que ya se encargará usted de subirnos un poco más el agua a los cartageneros. Otro caso de privatización cojonudo… No se olvide hacerlo, que las elecciones están muy cerca, y de paso, que le den una manecica de pintura al cerro de Los Mateos que también está muy falto.
Es mi deseo que todos los ciudadanos sepan diferenciar lo privado de lo público, no es necesario hacer grandes ensayos, sólo acudir al diccionario, sencillo. Que no se dejen engañar, ni tomar el pelo aunque demonicen a lo público como el mal que impide el progreso, es falso. La derecha siempre velará por lo privado. El socialismo lo ha de hacer por lo público. Lo han de defender siempre y por encima de argumentos que tergiversan la realidad.
La suma del esfuerzo de todos, no tiene por que ir a manos enguantadas de blanco.
Exijamos y defendamos lo público y dejemos lo privado para quien se lo pueda pagar. Sin más.
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